martes, 26 de enero de 2010

Un “buen” editor y jefe…



Aunque solo tengo experiencia como redactor en aprendizaje o un practicante, ya he tenido una experiencia educativa con alguien que se hacia llamar así mismo editor…
He aquí algunas de sus costumbres o acciones en las cuales se basa para trabajar haciendo revistas…



Promete, talvez algún día lo puedas cumplir…

Tener el poder de convencimiento y dar la sensación que todo puede salir bien, las posibilidades están ahí, parecen palpables, gana la confianza de alguien con cierta empatía confiándole algunas cosas relativamente intimas, ofrece grandes ganancias a futuro, dar la impresión de un crecimiento rápido gracias a la colaboración de esa persona que le pone empeño a lo que le gusta.
Hazle creer a esa persona que es indispensable, que nada puede realizarse sin su opinión y sus habilidades, trata de mantener contacto permanente aun cuando se distancie un poco sin dar explicaciones, créale nuevas esperanzas, dale vueltas al asunto, ofrécele un cargo mas importante…

Una vez que has creado buenas bases gracias a esa persona, ignórala por completo, no contestes sus llamadas, aíslala de todos tus demás elementos fieles o talvez ignorantes de la situación real, bríndale excusas tontas o trata de causarle pena contándole una historia triste o contándole que tan miserables son (según tu) la gente que debe generarte ingresos, con mucha suerte esa persona querrá dejar todo por la paz y se alejara para siempre de ti, quedando en las sombras. (Tendrás la sensación que nunca te va a reclamar nada porque es tan buena gente, parece que no mata ni una mosca, aunque ya te había advertido desde mucho antes, que no le gustaban los juegos tontos, y que la paciencia algún día se podía acabar).



Haz comentarios “constructivos” sobre la competencia.

Eres el mas exitoso, no importa como, pero tienes cierta aceptación, los demás están envidiosos de tu situación, todos son de lo peor, no saben nada de publicaciones eres lo máximo, procura dejar eso en claro con tus empleados, decirles que todas las demás publicaciones están en contra del grupo. La competencia no es más que un grupo de ilusos sin educación, odian tus éxitos, quieren partirle la cara a toda la gente exitosa.

Agrega a tu grupo de enemigos a tus colaboradores que hayan abandonado el proyecto, porque finalmente se quitaron la venda de los ojos, cuya paciencia llego a sus limites y dejaran de apoyarte por obvias razones (ofrecimiento de pagos, nunca cumplidos y tontas historias para justificar la falta de liquidez de la supuesta empresa).


Aprovéchate de los contactos y amistades ajenas…

Siempre encontraras alguien que conoce mucha gente que te puede servir en tu entorno, quien sin darse cuenta ha ido creando una cadena de contactos valiosos, como te tiene confianza, el muy tonto te ofrecerá presentarte a gente que pueda apoyar tus proyectos, se tomara la molestia de ser algo insistente sin provocar molestias, lograra que se forme un vinculo sólido, luego con disimulo pedirás las información de contacto directo, poco a poco lo iras sacando del juego, esperando que solo saque la cara por ti en situaciones complicadas en las cuales no sepas dar alguna explicación.

Se indiferente, mándale indirectas bien directas sobre como te burlas de el, talvez a algunos conocidos les haga gracia, creerás que el objeto de tu burla no se da cuenta, se volverá una costumbre y parodiaras a todos aquellos que se fueron, dando a entender a todos los demás, que fuiste abandonado y traicionado, estas en tu derecho de burlarte, eres un gran editor, nadie podrá parodiarte a ti, eres el que sabe todo, quien hace y deshace en tu propio negocio aunque carezca de orden y organización, eres el rey de la improvisación, todo el mundo esta a tus pies, todos creerán que esta fríamente calculado.



Bromea “sanamente” con tu personal…

Para crear un entorno seguro y agradable, un ambiente de amistad y camaradería entre tus empleados, hazles bromas en doble sentido, cuando alguno de ellos este ausente, resalta sus defectos, exagéralos, crea rumores sobre su sexualidad, todos ellos te verán como el tipo simpático y amiguero. Un buen día hazte pasar por el tipo serio y trata de hacerles creer que les están confiando las confidencias de otra persona, habla de los defectos de tus empleados (o colaboradores) anteriores, búrlate de sus costumbres.
Pasado un tiempo, preséntale en persona a aquellas personas presas de tus bien intencionados comentarios, siempre existirán quienes ignoran que hablan mal de ellos a sus espaldas, o que creen que nadie se deja llevar por los prejuicios de la información trucada o maniatada.

Crea caricaturas ofensivas de todos aquellos a quienes ya sacaste supuestamente de tu circulo de amistades, píntalos como de lo peor o mas deplorable de la sociedad, vuélvelos unos objetos de burla sin remedio, tu eres el bueno de la película, nadie se atreverá a escribir sobre tus costumbres (síguelo creyendo).



Seduce a tus posibles grandes aliados (luego deséchalos)

Ya prometiste grandes ganancias, sin embargo aun no puedes cumplir con tu promesa, invita a almorzar o regálale material de documentación para hacer sentir a gusto a quien te apoya y aun cree en ti, de vez en cuando págale la movilidad, hazle creer que le estas enseñando como seguir adelante con el proyecto por su cuenta, estas contándole los grandes secretos de tu éxito. Si escribe para ti, hazle creer que tiene un gran cargo o jerarquía en el grupo, sin embargo si se da cuenta que su nombre no figura al inicio o al final del artículo, culpa al diagramador o diseñador grafico del grupo.

Cuando haz logrado un aparente éxito, deja de lado a tu colaborador, ignóralo por completo, solo contéstale el teléfono de vez en cuando, el muy tonto creerá que aun existe un vinculo fuerte con el negocio.



No contrates un administrador…

El juego esta bien tal y como esta, no necesitas a alguien que ponga en orden el negocio, tu mismo te das abasto para tener en la cuerda floja todo, siempre podrás echarle la culpa de tus retrasos a tu multifuncional empleado (el que dibuja, diseña, diagrama, escribe en varias ocasiones, va a comprar el pan, cuida a tu hijo, es el punto de tus bromas crueles, etc.)
Confía en tu familia aunque estos aparenten ser tan improvisados y despreocupados como tu, después de todo ¿Qué podría pasar? ¿Acaso organizarían un concierto de rock que terminaría siendo una gran estafa?